
¿Qué tipo de uñas acrílicas son adecuadas para tu cliente?
03 Sep 2021¿Uñas acrílicas o de gel? ¿Esculpidas o de seda? Elegir adecuadamente una manicura depende mucho de las condiciones que presente cada clienta que acuda a tu centro de belleza. No obstante, siempre y cuando la escojas bien, tendrás la oportunidad de ofrecer la solución más conveniente para que queden encantadas.
A continuación te enseñamos cómo salir airoso en cada caso. ¡Presta atención!
Elige la técnica adecuada a cada clienta
Cuidar las uñas de tus clientes es la clave del éxito de tu trabajo profesional. Para ello, dominar las distintas técnicas existentes te ayudará a conseguir la manicura perfecta para cada una de las personas que soliciten tus servicios. Si logras que estén satisfechas, contribuirás a su fidelización.
En este sentido, lo mejor es conocer bien la actualidad los tipos de extensiones existentes en el mercado, así como otras alternativas que gozan de gran aceptación. Tendrás la oportunidad de conocer cuál es la recomendada en función de problemas como, por ejemplo, tener las uñas quebradizas o mordidas, entre otras circunstancias.
Acrílico
Las extensiones ideadas en material acrílico son las más aconsejables para aquellas personas que se muerden las uñas. Sirven incluso en el caso de que estas se muestren extremadamente cortas. La dureza que caracteriza a estas creaciones hará que tu clientela se vea obligada a abandonar un hábito que no le beneficia en absoluto.
Además, se traduce en una serie de ventajas que debes tener en cuenta. Son las siguientes:
- Su resistencia permite que duren varias semanas en perfecto estado.
- En caso de rotura, limarlas resultará más sencillo para quien las lleve.
- Su retirada en relativamente sencilla si la lleva a cabo un profesional como tú.
Gel
Si tus clientes muestran unas uñas en buen estado y no realizan tareas que las puedan llegar a dañar, recomiéndales que se decanten por las de gel. Como en el caso anterior, también puedes utilizarlas con quienes se muerdan las uñas y quieren dejar de hacerlo o, como mínimo, mostrar una manicura impecable que no revele ese mal hábito que han adquirido.
Es cierto que no son tan resistentes como las confeccionadas en acrílico y duran menos tiempo, pero ofrecen una imagen más natural. Para su aplicación se precisa de una lámpara de rayos UV, mientras que su retirada es especialmente fácil.
Esculpidas
Las esculpidas se construyen a partir de las naturales y son las más apropiadas cuando alguien acude a tu centro de manicura y muestra su deseo de tener unas uñas largas y firmes, aunque no lo acabe de conseguir. Si a tu clientela se le quiebran con facilidad y no consigue alcanzar la longitud deseada, esta solución le permitirá que sus manos sean como en sus sueños. Sentirá que has hecho magia.
Si las uñas esculpidas las ideas tanto en acrílico como en gel, ofrecerás un resultado verdaderamente bonito y saludable. Ten en cuenta, asimismo, otra de sus ventajas más apreciadas. Nos referimos a su durabilidad.
SNS
La última tendencia de moda, cuyas siglas responden a signature nail systems, gana seguidores a pasos agigantados. Consiste en la aplicación de un esmalte de uñas en polvo. Esta técnica también recibe el nombre de dipping. Es la ideal para aquella parte de tu clientela que no quiere recurrir a lámparas de secado ni a esmaltes de gel.
Los productos químicos agresivos se quedan, de este modo, fuera de la práctica de la que te hablamos. La durabilidad no tiene mucho que envidiar a otras alternativas, dado que prometen aguantar como el primer día durante un periodo de hasta tres semanas. Otro de los beneficios más destacados es el modo en que respeta la uña natural, por lo que si esta tiende a romperse con facilidad, no se verá aún más perjudicada.
Uñas de seda
Esta técnica consiste en la aplicación de una especie de tela sobre la uña, confeccionada en fibra de vidrio o seda, a la que se le van sumando progresivamente unas capas de resina. Gracias a estas capas, consigues ir dando forma y volumen a cada pieza sobre la que trabajas.
La manicura de este tipo evita que la uña natural se rompa, por lo que es perfecta para quienes sufren roturas a menudo. Ten en cuenta, sin embargo, que carece de la dureza que confieren materiales como el acrílico y el gel.
En definitiva, ahora que ya sabes qué tipo de manicura es la más conveniente en cada caso que afrontes en tu centro de estética, no tienes más que asesorar debidamente a quienes recurran a ti en busca de una solución a sus respectivos problemas. Las uñas acrílicas, las de gel, las esculpidas, las que reciben la denominación de SNS y las de seda configuran un variado abanico de propuestas. Especialízate en cada una de estas técnicas para ponerlas a disposición del público y serás capaz de atender las demandas de tu clientela.